Comprendiendo mejor la molestia de los padres con el M.E.P. y el Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia
Figura 1: Simbolo del movimiento L.G.T.B.
En la mañana estaba leyendo una nota de CRHoy titulado ¿Por qué celebración del MEP contra la homofobia genera críticas? donde plasma el malestar y las protestas de varios grupos de padres contrastando con las actividades que el MEP implementó para esa fecha.
Claramente el manual manda a realizar actividades que son acordes al nivel de la madurez de los estudiantes, entonces esos grupos de padres protestando las medidas del MEP no tienen ninguna razón valida en especial cuando se viene celebrando desde 2008 ¿Cierto?.
Amigas más jóvenes que yo, ni amistades en el valle central recuerdan estar celebrando el día contra la homofobia en su época de estudiantes, mucho menos yo que terminé el colegio en 2010.
El quid de la cuestión no es el cómo sino el qué cuando la "diversidad sexual" y el Estado –o más bien el poder político– se mezclan, pues no es extraño que los términos como "homofobia" se usen para contrariar argumentos o criticas hacia la "diversidad sexual" indiferentemente de quien lo diga o que tanto fundamento tenga su aclamación porque siempre es más fácil ignorar a una persona psicológicamente enferma que enfrentarla y lidiar con sus objeciones.
Así el qué en ésta situación es el moldeo implícito de la mente de la juventud con la forma de los términos políticos que son utilizados normalmente por miembros del movimiento L.G.T.B. para aporrear en la plaza publica a cualquiera que tenga una percepción negativa o desfavorable hacia la mentada "diversidad sexual", así el MEP en la teoría se limita a enseñar a los educandos que, por ejemplo, la violencia contra las personas "sexualmente diversas" es malo y no se debe hacer (y nadie decente objeta esto) pero en la practica también preparan el terreno para que sean las conversaciones que se desarrollan alrededor de estos temas polémicos los que ayuden a hacer la asociación de frases como «el matrimonio es entre hombre y mujer», «es imposible transicionar al sexo contrario» o «la homosexualidad es una desviación sexual» con un grupo de personas enfermas: los homofóbicos, transfóbicos o en términos generales los "diversofobicos" –siempre es más fácil ignorar a una persona psicológicamente enferma que enfrentarla y lidiar con sus objeciones–.
El qué y no el cómo es lo que molesta a un sector de la población, ese grupo de padres están legitimamente preocupados por las pretensiones del MEP, la molestia se agrava cuando ellos desean ejercitar la objeción de conciencia conforme a la patria potestad que naturalmente ellos tienen sobre sus hijos y el Ministerio los recibe literalmente con un cañazo al cráneo. La estrategia ha cambiado para el movimiento L.G.T.B. en las aulas, permear el currículum estudiantil es fundamental para el movimiento pues así dificultan que los chicos sean excluidos de las aulas por objeción de los padres cuando el tema asome su cabeza; una lección que dejo las clases de educación sexual en los colegios.